Un amigo mio dijo una vez, en un juego de palabras bastante ingenioso, "Yo lo que digo, te lo digo diciéndotelo". Lo que quizo decir es que el no tiraba indirectas, sino que te batía la justa de frente manteca . Y puedo decir que tiene razón porque me ha tocado vivir en carne propia sus criticas y sus elogios. "Cuanta franqueza!" decía yo. "Es envidiable". Pero después me di cuenta que con la honestidad brutal se pierde un poco el...glamour (palabra que por cierto me da asco) de la comunicación.
Si yo te dijera todo lo que te tengo que decir, 3 palabras me alcanzarian. Podría decírtelo ahora, y ver en qué terminamos. O podría dar un rodeo. Podría no decirte nada concreto, o podría di rectamente no decirte nada. ¡Cuanto coqueteo se perdería si fuéramos todos tan sinceros y directos como mi amigo! Yo creo que hablar es un juego y la sutileza es un arte... y que si bien la honestidad-brutal-sincera esta bien...tampoco esta mal poner un poco de...de...que ironía, que queriendo hablar de la poesía (digo "poesía" porque no se bien de que estoy hablando y justamente la poesía es de lo que menos sé) del habla me quede sin palabras.
No crean tampoco que defiendo las mentiras. Simplemente digo que a veces esta bueno, de a poco, decir lo que uno quiere decir, de formas diferentes, con palabras diferentes, gestos, con medios nuevos...
¿vos pensás que esta entrada es parte de lo que te quiero decir? Si querés te digo lo que quiero decirte...diciendotelo.
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